sábado, febrero 19, 2005

Lo q el Carnaval ha dejado de mi

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Allí estábamos, puntuales como nunca antes lo habíamos sido en nuestras miserables vidas, esperando a q diera comienzo el concierto de los Mojinos, no sé cuanto duró aquel atentado a la música, pero en cada canción q terminaba de sonar, “El Sevilla” decía:
-"Bueno, esta era la última, ¿o es q no tenéis prisa?"-;
yo creo q no lo decía en broma, y en verdad deseaba largarse de allí, porque con el frío q nos acompañaba querría tapar de una vez su barrigota.
Al terminar el "chou" fuimos caminando hasta el Wall, sitio conocido por sus chupitos, a cada paso que dábamos, teníamos q detenernos porque alguien quería tocar la guitarra de Nico, q iba disfrazado de gitano. Pero en el Wall no cabía ni Dios, y aunque Dios pudiese, no entraría allí; seguimos el viaje hasta el Trasgu, ahí pidieron una caldero de mocho cuando el reloj marcaba las 2; y a las 2:30 anunciaron por los “altavoces” q el local cerraría a las 3, el aviso fue el causante de jugar un "Yo nunca" radical, al salir de allí iban muy felices.
Apareció Manu, conocido musicalmente como Tomasito de Córdoba y conocido deportivamente como Fructencio Ramirez (pero esa es otra historia), disfrazado de Darth Maul q tocó "Nardo bop" con la guitarra de Nico pero eso de las canciones es... otra historia....
Vivimos la fascinante pelea entre el mismísimo Jack Cousteau y una momia lamentablemente desorientada.
El próximo destino era el Klan Irlandés. Cuando vimos a la "Compañia Easy del Regimiento 506 de la 101ª División Aerotransportada del Ejército de Estados Unidos" les preguntamos por las armas y el traje; no se si eran frikis o flipados; decía uno q le había costado el arma 320 euros, eléctrica disparo automático y semi automático, 200€ de traje “made in Hong Kong” replica exacta de las ropas de Vietnam, granada incorporada, 120 € de cartucheras, 60 € de casco con soporte para cigarrillos, virgen del Rocío colgando al cuello y a María Santísima en los bolsillos; ir todos los domingos a pegarse tiros no tiene precio.
-"Allí no hay arbitro, es un juego de honor, si te disparan, sales y si no sales, vacío el cargador de 300 balas sobre ti".-
En el mismo instante q todo esto nos contaban, mientras mirábamos para el super "Team America", dos “raros” le habían pedido la guitarra a Nico para demostrar sus dotes de estrellas, pero no encontraron las baquetas en la mochila, uno se enfureció y le pegó patadas hasta tirar el cachi de mocho q llevaban y habían dejado “posado” en el suelo. Le lloraba a su amigo:
-"no están, perdona q te grite, pero no están".
Fue corriendo a buscar unos palos para hacer una batería improvisada con la mochila, una bolsa de plástico y una alcantarilla (ni Safri duo tiene tanto nivel…).
Incluso un desconocido borracho se puso a bailar allí, mientras nosotros mirábamos a su alrededor muy serios y sumergidos en la música. -"ay, cruzó el estrecho para venir...."- q pena q no me acuerde de más letra porque no tenia desperdicio; al terminar pedía una monedita por el esfuerzo y Alfonso le dio 20 céntimos para q se entretuviera y pudiéramos marchar, pero el artista seguía a Nico con cara de lastima y le rogaba: "Déjame tocar la última, la última". Hay un video de eso con la cámara digital…
Me encontré con un amigo que me confundió con Mario Bross. (JODER, se veia CLARAMENTE q iba disfrazado de TEO)
Cuando marchamos del Klan, de camino a casa, vimos un limón muy apetitoso e intentaron batearlo unas cuantas veces con la guitarra; vino un desconocido disfrazado de Elvis a hacer de "Catcher"
Yo pensé q le hacían un 2º furaco a la guitarra cuando retumbaba “ponk” y el limón volando.
Terminó el partido y el último tramo a la cama fue con stage en la Panadería Luis, el hombre de arina.
Fue sin duda, una buena noche.
 

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