El abogado defensor tiene la palabra:
Señoría, miembros del jurado… el caso que tenemos ante nosotros, tildado por la acusación de ‘atrocidad’, no debe ser tomado a la ligera ni juzgado con presteza.
El Señor Lobo se comió a Caperucita, ¡sí! Pero fue por necesidad. Nunca hubo maldad en sus intenciones. ¿Qué malicia puede haber en los deseos de incluir carne fresca en su dieta mediterránea?
Porque, Señoría y jurado, el Lobo ibérico pasa hambre. ¿Serían ustedes capaces de pegar ojo cada noche, acostándose con el temor de que nunca jamás volverían a despertar?
Llaman ‘acusado’ a mi cliente, cuando es en verdad ‘acosado’. Acosado por cazadores furtivos y por la destrucción de su hábitat natural.
¿Saben que fue lo último que comió nuestro animal antes de devorar a la niña? Topillos, topillos muertos por envenenamiento, arrojados junto a su madriguera.
Inocente niña dicen… craso error, la culpa es de los padres, que permiten que su hija salga a la calle, meneando en su cestita el bocadillo de lomo y jamón york…
Por tanto, el caso, requiere reflexión; bien es sabido que en la vida debemos analizar los conflictos desde el punto de vista de cada parte implicada. Y porque quizá, al terminar en breves instantes mi intervención en defensa del Señor Lobo, también ustedes se sientan los culpables de este crimen.
1 comentarios:
Te escribo aqui asi parece que tienes mas comentarios (aunque solo sean mios, pero bah oye!! no te quejes que algo es algo)
y tu dices que eres vago? si yo la ultima actualizacion puse fotos de Sexo en Nueva York, por poner algo (osea que puse esa serie como podria haber puesto las fotos de una vaca pariendo)
Pues me interesaria leer la segunda parte de la historia, estare al tanto por tu blog para leerla en cuanto la publiques.
¿que no es peloteo? pues hasta que no hagas peloteo no vuelvo a firmar :P jejeje
Un saludo!!!
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